Convocan a discutir el salario mínimo
Debate por la situación laboral / Estrategia oficial ante los trabajadores
El Gobierno citó a sindicalistas y empresarios para mañana; la CGT reclama un aumento del 41%, que el sector privado rechaza
En este escenario, Moyano planteará elevar el salario mínimo, hoy de 1840 pesos, a 2600 pesos. Es decir que impulsará un incremento del 41 por ciento de los haberes. En tanto, los empresarios no quieren sobrepasar los 2300 pesos y la Casa Rosada imagina el nuevo piso de haberes en 2400 como máximo.
En el Gobierno anticiparon que la discusión será ardua: Moyano está muy firme en sus reclamos. El Consejo del Salario fue convocado ayer por el ministro de Trabajo, Carlos Tomada. No fue la única señal de distensión hacia el jefe de la CGT, que venía reclamando un aumento salarial: Moyano se reunió anteayer con el ministro de Planificación, Julio De Vido, para descomprimir tensiones.
Ocurrió durante un almuerzo del cual participaron también los directivos de la Federación de Empresarios del Transporte de Cargas (Fadeeac) para debatir el futuro del sector. Pero en el Gobierno aseguraron a La Nación que tras ese encuentro «bajaron las tensiones» entre la CGT y la Casa Rosada.
«De Vido y Moyano están hablando siempre», aseguraron a La Nación cerca de la Presidenta. Entre ellos tratan cuestiones políticas y del sector de transporte. Los temas laborales pasan por Tomada.
Otro gesto del Gobierno a Moyano fue ayer la salida al ruedo del jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, que negó tajantemente que la Casa Rosada promueva una rápida renuncia de Moyano al frente de la CGT para después de las elecciones presidenciales del 23 de octubre próximo. «La CGT toma las decisiones per se y como le parece», dijo Fernández.
Buscó así desestimar versiones emanadas del propio Gobierno y de sectores sindicales enfrentados con el jefe de la CGT acerca de que la Presidenta apuraría la salida de Moyano de la central obrera después de octubre.
Fuentes cercanas a Moyano aseguran que el líder camionero cumplirá su mandato, que termina en julio de 2012, y que sólo entonces se renovarán autoridades en la sede de Azopardo.
Sorda disputa
Moyano y el Gobierno mantuvieron una sorda disputa en los últimos meses. El jefe sindical presionó por diversos reclamos con bloqueos, piquetes y amenazas de paros nacionales, mientras que la Presidenta le exigió públicamente deponer esa actitud.
Pero el líder de la CGT redobló la apuesta y pidió múltiples cargos en las listas legislativas para octubre y promovió la idea de que la CGT pusiera el candidato a vicepresidente. La jefa del Estado no le dio el gusto y le dio escasa representación a la CGT en las nóminas legislativas.
En medio de esos tironeos, empresarios y sindicalistas llegan con pretensiones alejadas al Consejo del Salario Mínimo. La CGT, aliada a la CTA de Hugo Yasky, plantea que el nuevo piso remunerativo, hoy en 1840 pesos, debería aumentar en un 41%, hasta 2600 pesos.
Pero la Unión Industrial Argentina, presidida por José Ignacio de Mendiguren, no quiere superar el 24%, lo que lo ubicaría en 2282 pesos (de lo que se informa por separado). El Gobierno buscaría un término medio, 2400 pesos, para lograr un aumento significativo, pero sin darle una victoria política clara a Moyano.
Un objetivo económico del Gobierno es mantener alto el nivel de consumo, sobre todo en plena campaña electoral y en la antesala de lo que puede ser una crisis de recesión internacional.
Pero al mismo tiempo procura dar señales al sector privado para lograr un aumento en las inversiones productivas. Ayer, en el Precoloquio de IDEA, en Rosario, no pocos industriales planteaban su preocupación por el elevado costo laboral en dólares.
«La discusión será larga. Puede durar hasta dos meses», aventuraron en la Casa Rosada. Si no se llega a un acuerdo, tendrá que intervenir la cartera de Tomada, aseguraron en la CGT. Luego de esta discusión el Gobierno contempla una suba de las asignaciones familiares y de la Asignación Universal por Hijo en un 20 o 25%. La CGT planteará también elevar el mínimo no imponible del impuesto a las ganancias.
La discusión salarial que comenzará mañana se dará en medio de un clima de fuerte tensión social. Ayer, diversos grupos piqueteros realizaron nueve cortes de calles en diferentes puntos del país en reclamo de un aumento de los montos de los planes sociales (de lo que se informa por separado).
Por Mariano Obarrio | LA NACION
Foto: DyN
(Información General – Panorama Político)
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