«El 40% de la industria tiene que reforzar su competitividad»
El economista industrialista que asesora a IDEA cree que hay voluntad de los empresarios para dialogar con el Gobierno sobre competitividad e inclusión social. También afirmó que hay buenas oportunidades de negocios para los inversores.: Bernardo Kosacoff
Enviada especial a salta
En algún sentido, Bernardo Kosacoff, es un hombre bisagra. El economista es respetado por el Gobierno con cuyo pensamiento tiene puntos de contacto, tanto, que en algún momento se barajó su nombre como eventual ocupante del ministerio de Economía. Pero, al mismo tiempo, asesora a los empresarios de Idea para armar la agenda de sus encuentros y en los dos últimos años se transformó en número puesto de muchos cónclaves patronales. Desde esta especie lugar puente, el ex titular de la Cepal en Argentina, especializado en temas industriales, advierte en diálogo con BAE sobre el problema de la caída de la inversión que se esbozó en los últimos meses pero descarta que esa pereza inversora se deba a cuestiones coyunturales.
-Hay economistas que plantean como un dilema que haya 150 mil millones dólares de argentinos fuera del sistema, que serían un bálsamo si se volcaran al sistema productivo. No habría ni déficit de inversión ni necesidad de restricciones cambiarías…
-Es una alternativa. Hay un colchón del sector privado que tiene poco endeudamiento en relación a otros tiempos y con un bajo nivel de morosidad, que con el sector financiero está por debajo del 1 por ciento, cuando en la época de la convertibilidad estaba al 30 por ciento. Al mismo tiempo, el sector privado acumuló un buen nivel de reservas, que en los últimos años se engrosaron significativamente. En este contexto, creo que uno de los grandes desafíos es la internalización del ahorro. En particular en un país con un gran potencial en muchos sectores.
-¿Cree que la resistencia a invertir ese ahorro responde, en este momento, a razones coyunturales, macroeconómicas y políticas?
-No. En absoluto. No creo que haya un factor. El sector privado fue acumulando a lo largo del tiempo diversas razones para tener cierta cautela. Esa es una cuestión estructural que hay que revisar.
-¿Usted es de los que opinan que Argentina necesita subir indefectible y rápidamente su nivel de inversión?
-El año pasado, con un buen nivel de actividad, la inversión alcanzó un registro histórico del 24 por ciento del Producto Bruto Interno. Pero cuando se desagregan los datos se ve que hay una participación importante de la construcción y de la inversión pública. La inversión en máquinas y equipos es sólo de alrededor del 8 por ciento del Producto Bruto Interno. Obviamente este es un punto muy significativo en el que llegamos a fin del año pasado. Para poder sostener el crecimiento y generar empleo hay que agrandar la torta y para agrandar la torta hay que invertir. También capacitar recursos humanos e invertir en investigación y desarrollo. Esto implica que es necesario subir la inversión algunos puntos adicionales. En junio se plantea una situación preocupante, porque, contrariamente, la inversión parece haberse desacelerado.
-¿No le parece contradictorio que haya renuencia inversora si se considera que a la mayoría de los sectores en los últimos años les fue muy bien?. Basta con mirar los balances.
-Ese es un desafío de la política económica, que tiene que poner los incentivos y el aparato regulatorio para fortalecer el proceso de inversión en la Argentina.
-¿Cree que el actual conflicto entre el Gobierno Nacional y el gremio de los Camioneros puede desestimular la inversión?
-Hay que ver cuáles son los temas claves de la agenda de política pública. Resolver ese conflicto es uno. Pero es necesario dejar que los fenómenos se decanten para juzgar el impacto. No sirve evaluarlo en caliente. Menos si se piensa que los procesos de inversión son fenómenos de largo plazo. Mezclar ahora una cosa con la otra es equivocado.
-¿Coincide con la sentencia de muchos empresarios que aseguran que la conflictividad y los cambios regulatorios desalientan la inversión?
-Lo primero que tiene que haber es negocio y una rentabilidad que se pueda calcular. Invertir es tomar una decisión sobre recursos escasos, que van hacia un lugar o al otro. Cuáles son los determinantes de la inversión da lugar a una discusión abierta en el campo de la economía. Hay quienes dan preeminencia a los contratos y a la estabilidad de las reglas de juego. Yo creo que lo fundamental es que haya un negocio.
-¿Hay algún factor de desaliento coyuntural?
-La administración del comercio exterior y la caída en la importación de bienes de capital, que retrocedió un 30 o 40 por ciento, implican alguna dificultad. Ahorrar divisas en esto no es bueno. En Argentina tenemos que tener mucho cuidado en no bloquear los procesos productivos y de ampliación de oferta, no sólo de los bienes para el mercado interno sino para la exportación.
-Un sector complicado es el automotor, que está succionando hacia abajo los índices de crecimiento industrial. El economista Dante Sica planteó que hay un problema de competitividad que le hace perder mercados externos, más allá de la caída de la demanda de Brasil: los autos argentinos son caros.
-Creo que hay un fuerte contenido de autopartes importadas pero el mercado doméstico sigue fuerte y ahora se recuperó porque la compra de un auto es un mecanismo de ahorro que tiene la gente. La buena noticia es que Brasil bajó la tasa de interés y dio facilidades impositivas, con lo que ya se está observando una fuerte recuperación de la demanda brasileña. En el segundo semestre seguro que habrá una recuperación de las exportaciones hacia ese destino. Argentina tiene aún una asignatura pendiente de integrar más partes nacionales y así solucionar el déficit estructurar.
-¿Hay algún otro sector que tenga problemas de competitividad? -El 40 por ciento de la industria argentina tiene que reforzar su eficiencia y competitividad. Y esto es clave para pagar mejores salarios y tener un desarrollo más inclusivo. -Usted asesora a Idea (Instituto del Desarrollo Empresarial de la Argentina) en la elaboración de agenda temática. Desde este lugar, ¿ve cuidado en los empresarios a abordar públicamente temas que puedan ser controvertidos?
-No. Creo que hay voluntad de diálogo para tratar temas de competitividad o de inclusión social.
-No temas calientes de la coyuntura…
-Esa es una cuestión que siempre supera un coloquio.
Kosacofí espera que las exportaciones de automóviles a Brasil se recuperen en el segundo semestre
(Automotrices – Sector Industrial)
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