Liberan importaciones para facilitar la cumbre con Brasil
Argentina – 31/05/2011 – La Nación – Pág. 1/Economía & Negocios – Tiempo de Lectura: 3′ 55»
Los dos gobiernos se comprometieron a destrabar productos por 40 millones de dólares de cada lado
Los dos gobiernos se comprometieron a destrabar productos por 40 millones de dólares de cada lado
Oliver Galak
LA NACION
El gesto público fue elevar a rango de ministros la reunión bilateral que había sido programada para mañana entre los negociadores de ambos países. Pero fue el gesto privado el que permitió correr algunos de los nubarrones en la relación: la Argentina y Brasil se comprometieron a liberar, en el transcurso de esta semana, importaciones por un valor total de 40 millones de dólares cada uno.
El dato sobre los «gestos de buena voluntad» fue confirmado ayer a La Nación por fuentes oficiales de Brasilia. Horas antes, el gobierno argentino había difundido que el encuentro que originalmente estaba pautado entre los secretarios del área industrial sería encabezado por los ministros Débora Giorgi y Fernando Pimentel.
«En nuestro caso, los productos a ser liberados son los autos. En el caso argentino, aún no han sido definidos», precisaron las fuentes brasileñas. Uno de los productos sobre los que Brasil está haciendo más presión es el de la maquinaria agrícola, aunque también podrían liberarse otros rubros alcanzados por las licencias no automáticas (LNA) argentinas, como electrodomésticos, neumáticos, baterías o calzado.
El compromiso entre ambos gobiernos, aclararon en el gobierno de Dilma Rousseff, implica que los productos serán liberados de aquí al viernes, pero deberían registrarse los primeros avances entre hoy y mañana.
En el Ministerio de Industria argentino señalaron que las partes todavía están discutiendo sobre los rubros alcanzados por estos gestos de buena voluntad. «Pero está claro que políticamente hay una sintonía de que esto no tiene que escalar más y llegar al jueves con un principio de acuerdo», indicó un funcionario de la cartera que dirige Giorgi.
La reunión de pasado mañana tendrá lugar en el Ministerio de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior, con sede en Brasilia. Además de los ministros, participarán los secretarios Eduardo Bianchi y Alessandro Teixeira, que la semana pasada no lograron una salida al conflicto desatado en el último mes por la escalada de trabas al comercio bilateral.
«He recibido una llamada de Pimentel esta mañana y ambos coincidimos en las buenas perspectivas para el próximo encuentro», dijo Giorgi, según un comunicado oficial. «Somos optimistas en la solución de los diferendos comerciales.»
La disputa entre la Argentina y Brasil fue mencionada indirectamente en el encuentro que mantuvieron ayer en Montevideo Rousseff y el presidente uruguayo, José Mujica. «Nunca estaremos integrados en América latina si no logramos la integración con inteligencia», dijo Mujica, luego de firmar con su par brasileña un compromiso de obras de interconexión para mejorar el comercio.
La decisión de elevar a nivel ministerial el encuentro de negociadores fue celebrada ayer puertas adentro por los miembros de la industria automotriz. Los empresarios reunidos en la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa) habían lamentado en los días previos que, pese a la gravedad de las medidas (Brasil bloqueó el ingreso de la principal exportación industrial argentina), los ministros no se habían reunido.
Fuentes de la industria estimaron que hay unos 4000 vehículos de fabricación nacional trabados por las LNA brasileñas (sin contar los que deberían ingresar esta semana). Su valor de mercado estaría cerca de los 50 millones de dólares, con lo que la mayoría de esas unidades deberían ser liberadas por Brasil en el transcurso de esta semana.
En la reunión de la semana pasada entre Bianchi y Teixeira, uno de los puntos de discordia fue el plazo que se tomaría Brasil para liberar las licencias de los autos argentinos. El plazo máximo previsto por la Organización Mundial del Comercio (OMC) es de 60 días. Brasil ofreció acelerar el trámite a 10 días para los autos argentinos (las LNA alcanzan a todos los orígenes) y la Argentina solicitó un plazo máximo de 4 días.
Ayer, un ejecutivo de la industria automotriz señaló que están dispuestos a aceptar los 10 días si les pueden garantizar que ese será el plazo final. «Queremos tener la tranquilidad de que, si te dicen 10 días, podamos planificar la producción y en 10 días tener una licencia. Hoy hay incertidumbre y no se sabe cuánto tiempo les va a llevar otorgar la licencia. Diez días no es un gran problema si tenés la certeza», explicó.
LA NACION
El gesto público fue elevar a rango de ministros la reunión bilateral que había sido programada para mañana entre los negociadores de ambos países. Pero fue el gesto privado el que permitió correr algunos de los nubarrones en la relación: la Argentina y Brasil se comprometieron a liberar, en el transcurso de esta semana, importaciones por un valor total de 40 millones de dólares cada uno.
El dato sobre los «gestos de buena voluntad» fue confirmado ayer a La Nación por fuentes oficiales de Brasilia. Horas antes, el gobierno argentino había difundido que el encuentro que originalmente estaba pautado entre los secretarios del área industrial sería encabezado por los ministros Débora Giorgi y Fernando Pimentel.
«En nuestro caso, los productos a ser liberados son los autos. En el caso argentino, aún no han sido definidos», precisaron las fuentes brasileñas. Uno de los productos sobre los que Brasil está haciendo más presión es el de la maquinaria agrícola, aunque también podrían liberarse otros rubros alcanzados por las licencias no automáticas (LNA) argentinas, como electrodomésticos, neumáticos, baterías o calzado.
El compromiso entre ambos gobiernos, aclararon en el gobierno de Dilma Rousseff, implica que los productos serán liberados de aquí al viernes, pero deberían registrarse los primeros avances entre hoy y mañana.
En el Ministerio de Industria argentino señalaron que las partes todavía están discutiendo sobre los rubros alcanzados por estos gestos de buena voluntad. «Pero está claro que políticamente hay una sintonía de que esto no tiene que escalar más y llegar al jueves con un principio de acuerdo», indicó un funcionario de la cartera que dirige Giorgi.
La reunión de pasado mañana tendrá lugar en el Ministerio de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior, con sede en Brasilia. Además de los ministros, participarán los secretarios Eduardo Bianchi y Alessandro Teixeira, que la semana pasada no lograron una salida al conflicto desatado en el último mes por la escalada de trabas al comercio bilateral.
«He recibido una llamada de Pimentel esta mañana y ambos coincidimos en las buenas perspectivas para el próximo encuentro», dijo Giorgi, según un comunicado oficial. «Somos optimistas en la solución de los diferendos comerciales.»
La disputa entre la Argentina y Brasil fue mencionada indirectamente en el encuentro que mantuvieron ayer en Montevideo Rousseff y el presidente uruguayo, José Mujica. «Nunca estaremos integrados en América latina si no logramos la integración con inteligencia», dijo Mujica, luego de firmar con su par brasileña un compromiso de obras de interconexión para mejorar el comercio.
La decisión de elevar a nivel ministerial el encuentro de negociadores fue celebrada ayer puertas adentro por los miembros de la industria automotriz. Los empresarios reunidos en la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa) habían lamentado en los días previos que, pese a la gravedad de las medidas (Brasil bloqueó el ingreso de la principal exportación industrial argentina), los ministros no se habían reunido.
Fuentes de la industria estimaron que hay unos 4000 vehículos de fabricación nacional trabados por las LNA brasileñas (sin contar los que deberían ingresar esta semana). Su valor de mercado estaría cerca de los 50 millones de dólares, con lo que la mayoría de esas unidades deberían ser liberadas por Brasil en el transcurso de esta semana.
En la reunión de la semana pasada entre Bianchi y Teixeira, uno de los puntos de discordia fue el plazo que se tomaría Brasil para liberar las licencias de los autos argentinos. El plazo máximo previsto por la Organización Mundial del Comercio (OMC) es de 60 días. Brasil ofreció acelerar el trámite a 10 días para los autos argentinos (las LNA alcanzan a todos los orígenes) y la Argentina solicitó un plazo máximo de 4 días.
Ayer, un ejecutivo de la industria automotriz señaló que están dispuestos a aceptar los 10 días si les pueden garantizar que ese será el plazo final. «Queremos tener la tranquilidad de que, si te dicen 10 días, podamos planificar la producción y en 10 días tener una licencia. Hoy hay incertidumbre y no se sabe cuánto tiempo les va a llevar otorgar la licencia. Diez días no es un gran problema si tenés la certeza», explicó.
BMW PODRÁ IMPORTAR MOTOS
La empresa BMW Group Argentina acordó con el gobierno nacional un plan de reducción de importaciones que le permitirá volver a ingresar motocicletas en el mercado argentino. «La liberación de la aduana argentina se realiza a partir de un pedido del gobierno nacional aceptado por BMW Group Argentina para reducir durante 2011 el volumen de sus importaciones de motocicletas en un 40% en valores absolutos en comparación con el año 2010», informó la empresa en un comunicado. El acuerdo, sin embargo, no incluye a los automóviles BMW y Mini, cuyo ingreso al país sigue trabado hasta que la empresa presente un plan para exportar por un monto similar al de sus importaciones, según la exigencia planteada por la ministra de Industria, Débora Giorgi.
(Autopartes – Automotrices – Titulares – Panorama Económico)
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